Journal No. 1
- Martina Fasciani
- hace 2 horas
- 4 Min. de lectura
“Not choosing” is still a choice. | “No elegir” sigue siendo una elección.
Antes de empezar, te propongo que acompañes las próximas lineas con la siguiente playlist que me acompañó mientras que las escribía desde mi cama una noche de invierno en Buenos Aires, y desde la mesa de mi nuevo comedor en una tarde de lluvia en Málaga, unos pares de meses después.
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Ahora sí, qué loco es el momento en el que sin quererlo, sin esperarlo, sin siquiera desearlo, entendés algo. Y por «entender» me refiero a ese preciso momento en el que te iluminás, te caen las fichas, o simplemente algo de todo eso que probablemente ya habías escuchado o leído antes, te resuena de una manera especial. Tan especial que la «entendés» con todos tus y sus sentidos. Uno de esos miles de rompecabezas que tenías empezados se completa, la última pieza se encuentra y encaja dando la pauta de que ya estás listo para avanzar a la siguiente aventura, a la siguiente acción, a todo eso que sigue, pero esta vez con todo ese juego, con todas esas piezas entrelazadas a nuestro favor.
Esta semana «entendí» el titular de este journal. Me impactó tanto esta reflexión que, aunque quisiera decir “invitó”, me obligó prácticamente a hacer algo al respecto. Resulta que me encuentro en uno de los momentos de mayor transición de mi vida (o por lo menos hasta el día de la fecha en que escribo esto), y es que es la primera vez que tengo el honor de presenciar este evento de manera 100% conciente, pues antes o carecía de conciencia en aquél momento por ser más jóven o no tenía ni idea del efecto de aquellas acciones que estaba tomando. Claro que nadie puede saber a dónde lo llevarán exactamente sus decisiones en el futuro, pero esta vez tengo la suerte (y la audacia) de poder ELEGIR hacia donde quiero ir.
Como todo momento de cambios en la vida, el balance puede ser más difícil de lo normal de encontrar. Si bien en los últimos tres meses vengo accionando y eligiendo más que en los primeros 4 meses del mismo año, estas últimas semanas, luego de tanto tildar, tachar y avanzar, comencé a sentirme un tanto cansada (lógicamente) y luego estancada con algunos temas que evitaba resolver o encarar por distintos motivos; hasta que llegaron a mi las benditas palabras de Sartre. Sólo costó un par de días hasta que las «entendiera», las abrace y las adopte. La reflexión es bastante clara a decir verdad, y una vez que te das cuenta de que la pelota está en tus manos, ya no hay vuelta atrás. ¿Vas a elegir cómo accionar o lo va a elegir alguien más? ¿Vas a hacerte cargo de tus elecciones o vas a luchar contra los efectos de tu procrastinación o cansancio?
Y aunque lo siguiente pueda delatar que, como muchos, lo he leído en una red social, y esto mismo pueda susurrar con un megáfono mi lado más banal, no deja de ser una de las piezas, un tanto cliché para algunos, pero útiles para mi para completar este rompecabezas: “Choose your hard” - elige tu difícil.
Tener el poder, y a veces la suerte y la libertad, de elegir qué camino tomar, qué acción ejecutar para acercarnos un poco más a donde queremos estar, probablemente sea uno de los mejores gestos que podemos hacer por uno. Abstrayendonos de todo lo ajeno, lo exterior, todo lo que no podemos controlar, lo único que sí podemos hacer, es elegir por nosotros, a conciencia, por nuestro pasado, por nuestro presente y por nuestro futuro. Con pequeños gestos y pequeñas acciones, todos los días..
[STOP] Esto claramente no se trata de sobreanalizar cada paso que damos, ni de darle mil vueltas a un tema con el fin de hacerlo perfecto, no. Sino simplemente intentar concientizar de que tal vez hayan más cosas a nuestro alcance de las que podamos participar de manera más activa y más acorde a nuestros intereses y a nuestra forma de ser para alcanzar aquello que tanto anhelamos. Un pasito a la vez, un día a la vez.
Estos primeros párrafos fueron escritos mucho antes de quién soy hoy, después de una gran elección, pero una más de las últimas de cientos de apuestas que hice por mi en estos últimos 6 meses. Estas palabras fueron escritas en agosto del 2024, y hoy, luego de elegir tantas cosas en pos de mi bienestar, de mi crecimiento, de mis sueños, de todo aquello que en verdad anhelo y aprecio, leer estas palabras me llenan de orgullo.
Y sí, puede que esta sea una frase promocionada con millones de vistas, o la nueva galleta de la fortuna, o el último bait de tu guía espiritual y su bestseller. Podés llamarlo como quieras, pero si estás leyendo esto es porque finalmente ELEGÍ.
Bienvenidos a este espacio inaugurado como el lugar en donde me permitiré ser, explorar, jugar y compartir mis aventuras de esta infinita exploración. Abróchense los cinturones, sueltense el pelo, disfrutenlo conmigo, este es un viaje sin igual 🧡🏹
-m
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